martes, 11 de marzo de 2008

Rodolfo, la gracia de humorvisión














Ya lo dijimos en un post anterior, Rodolfo era nuestro candidato a Eurovisión. Ahora ya no sólo es el nuestro sino también el de España. "Larga vida al humor" como acaba Andreu Buenafuente en su post de ayer.

Apoyamos asímismo las razones que da el propio Andreu para argumentar porque ha ganado Rodolfo, empezando por la primera como casi siempre empiezan las cosas, porque le han votado. Y así el resto.
Además David Fernández, el actor que se esconde debajo del tupé y detrás de la guitarra, es un gran actor por menudo que parezca y gran persona. Y nosotros tenemos la suerte de encontrarnos entre sus amigos. Y por supuesto entre sus fans, mucho antes de que Rodolfo le arrendara su cuerpo de actor para transformarlo en el disparatado personaje.
A David, el actor, le tratamos de homejear por su carrera el año pasado en Panticosa. Y decimos le tratamos porque pese a que el homenaje se lo merece, ese y 10 como ese, no sabemos si de lo que tratamos es que el homenaje sirviera como excusa para que estuviera con nosotros. Porque es de esas personas con las que te gusta estar. Y esto, junto con la frase grouchiana de "perdonen que no me levante" es lo mejor que se puede escribir en el epitafio de uno: "era una persona con la que gustaba estar".
Además es un genio, y esto casi es mejor que se te reconozca en vida porque muerto ya me dirás tú pa´qué vale, e hizo uno de los mejores discursos de recogida de un premio que jamás hemos escuchado en nuestra vida. Si lo hubiera escuchado, se hubiera reído hasta el imperturbable Montilla. Bueno, igual Montilla sólo hubiera hecho una leve mueca que eso, para él, ya es mucho. Igualmente recordamos como la noche anterior al premio, un David embriagado por la emoción y por lo que no es emoción, hacía de las suyas, queda en nuestra memeria lo de los "malotes de Panticosa". (Esto es la típica gracia que sólo es graciosa si has estado allí, sirva como guiño a los que estuvieron y como desconcierto y envidia para los que no.)
Así que por apoyar a David y por la victoria del humor, nosotros estamos con Rodolfo. Porque Rodolfo merece ir a Eurovisión y porque Eurovisión se merece a Rodolfo.

Para justificarnos, recuperamos un texto extraído de una entrevista a David Tueba aparecida en el diario "El País" el 07/04/06 y que hemos utilizado en varias ocasiones para referirnos al humor:
“Ante el peligro de tomarte demasiado en serio, la mejor recomendación es mirarte en un espejo. Me gusta la comedia porque nos enfrenta a nosotros mismos convertidos en objetos de risa. Enseña nuestras carencias, nuestras lagunas, nuestros defectos, nuestras miserias. Todo eso que el sentimentalismo trata de esconder. Ahora no puedes reirte de nadie porque ofendes, ya sea a un gremio profesional, a los afectados por una enfermedad, a una nación o a una región. Sale un señor, hace un chiste y al día siguiente tiene que pedir excusas a tres asociaciones. Si perdemos esa guerra, habremos convertido el mundo en un lugar invivible. La risa es la única victoria del indefenso frente al poderoso, de la víctima frente al verdugo, del raro frente al normal. La risa es como la junta de accionistas de los pobres. La comedia es, para mi, el género más capaz de retratar lo que somos.”

Por eso Rodolfo, y con él, la risa y la capacidad de convertir en ridículo lo que en verdad lo es, eurovisión. El chiki-chiki es la mejor forma de reirnos de nosotros mísmos, de reirnos del cutrerio con el que hemos ido construyendo eurovisión. De reirnos de nuestras carencias al tratar de importante a lo que en realidad no lo es. Rodolfo, el humor, ha venido para vestirnos de objetos de risa. La ropa es eurovisión. A quién le incomode el traje tendrá que encargar al sastre de la vida que le haga uno nuevo, a ser posible de metal, porque sin la tela del humor, los golpes duelen más.

Afortunadamente nuestra España ha sido grande en su elección y libre para elegir y así en la grandeza de esta España libre que tenemos un tío con el pelo grasiento, tupé y guitarra de juguete es candidato a eurovisión. Por la gracia del humor. Amén.

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